«No ha sido aprobado el pedido de vacancia por causal de incapacidad moral permanente», dijo el presidente del Congreso, Luis Galarreta, tras la sesión. La oposición no llegó a los votos necesarios.
El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, se salvó de ser destituido por el Congreso luego de que la oposición no lograra los 87 votos necesarios para declarar la vacancia del cargo, tras una sesión de 14 horas.
«No ha sido aprobado el pedido de vacancia por causal de incapacidad moral permanente», señaló el presidente del Congreso, Luis Galarreta, tras la votación, que dejó 79 votos a favor de la destitución, 19 en contra y 21 abstenciones.
«Está en sus manos salvar la democracia o hundirla mucho tiempo. Soy un hombre honesto, jamás he recibido un soborno, una coima o una prebenda. Ni mi empresa ni yo hemos contratado con el Estado peruano. Jamás incurrí en un conflicto de intereses«, dijo Kuczynski en su defensa previa al debate. «El daño no me lo harán a mí, se lo harán al Perú«, concluyó.
El Congreso intentó desplazar a Kuczynski por «permanente incapacidad moral». Los impulsores de la caída habían reunido los votos para alcanzar el número mágico de 87 y remover de una vez al mandatario. Sin embargo, sobre la marcha esa plataforma se volvió inestable. El juicio político se activó apenas ocho días después de una investigación que reveló documentos que mostraban vínculos entre Kuczynski y el gigante brasileño de la construcción Odebrecht, centro de un escándalo por el pago de sobornos millonarios en toda la región.